Reflujo gastroesofágico

Actualizado 20 julio 2024

Orientación al paciente

Definición

Retorno del contenido del estómago (alimentos en digestión y enzimas digestivas) al esófago, laringe y hasta la cavidad oral. Puede ser normal o patológico.


Causas

¿Cuáles son las causas del reflujo gastroesofágico?

El reflujo gastroesofágico está frecuentemente asociado a factores conductuales, como: Tabaquismo, acostarse inmediatamente después de una comida, obesidad y la ingestión de alimentos grasos, cítricos, condimentados y con cafeína. También existe la posibilidad de asociación con otras enfermedades, principalmente gastrointestinales.


Factores de riesgo

¿Cuáles son los factores de riesgo para la aparición del reflujo gastroesofágico?

Los pacientes obesos, fumadores y consumidores de alcohol tienen más probabilidades de desarrollar este síntoma.


Síntomas

¿Qué síntomas están asociados al reflujo gastroesofágico?

  • Sensación de ardor en el estómago
  • Regurgitaciones
  • Aumento de la salivación
  • Eructos

Diagnóstico

¿Cómo se aborda el diagnóstico para casos de reflujo gastroesofágico?

El reflujo se considera patológico cuando cursa con pirosis (ardor) y regurgitación al menos 2 veces por semana. A partir de la definición de causas y enfermedades, pueden realizarse exámenes complementarios o el tratamiento puede ser indicado basado en la información recopilada durante la consulta médica.


Tratamiento

¿Cómo se trata el reflujo gastroesofágico?

El tratamiento dependerá de la gravedad del cuadro. Siempre se indican medidas conductuales para mejorar los síntomas. Ver el tema «Prevención» a continuación. Pueden prescribirse medicamentos, dependiendo del caso.


Prevención

¿Cómo prevenir la aparición del reflujo gastroesofágico?

  • Elevar la cabecera de la cama (15 cm), utilizando un apoyo bajo las patas de la cama o almohadas.
  • Evitar acostarse durante las 2 horas posteriores a las comidas.
  • Evitar comidas espaciadas y en gran cantidad.
  • Moderar la ingesta de los siguientes alimentos: Frituras y grasos, alimentos condimentados (pimienta, ketchup), tés ricos en cafeína (verde, mate y negro), suplementos de cafeína, frutas cítricas, café, bebidas alcohólicas, bebidas gaseosas/refrescos, menta, hierbabuena y productos a base de tomate o chocolate.
  • No fumar o, al menos, reducir la cantidad de cigarrillos consumidos por día.
  • Tener en cuenta los medicamentos potencialmente «de riesgo».
  • Reducir el peso corporal.
  • Tomar los medicamentos prescritos, incluso en ausencia de síntomas.
  • Los inhibidores de la bomba de protones deben tomarse preferiblemente en ayunas (ej. Omeprazol, Pantoprazol, Lansoprazol, Esomeprazol, Rabeprazol, Deslansoprazol).

Referencias bibliográficas

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