Actualizado 16 octubre 2024
Definición
La diabetes mellitus tipo 1 (DM1), una de las enfermedades crónicas más comunes en la infancia, es causada por una deficiencia de insulina tras la destrucción de las células beta pancreáticas productoras de insulina.
Epidemiología
La edad de presentación de la DM1 tiene una distribución bimodal, con un pico entre los 4 y 6 años y un segundo al inicio de la pubertad (entre los 10 y 14 años). En general, aproximadamente el 45% de los niños se presentan antes de los 10 años.
La DM1 es responsable de casi todos los casos de diabetes antes de los 10 años, el 90% de los casos en niños de 10 a 14 años y el 80% en jóvenes de 15 a 19 años.
Aunque la mayoría de las enfermedades autoinmunes son más comunes en las mujeres, no parece haber diferencias entre los sexos en la incidencia general de DM1 en la infancia. A nivel mundial, la proporción de hombres y mujeres diagnosticados con DM1 en la edad adulta joven es de aproximadamente 1.5:1.
La DM1 sigue siendo la forma más común de diabetes infantil, a pesar de la creciente tasa de diabetes mellitus tipo 2 (DM2).
Fisiopatología
Enfermedad crónica con interacción entre factores genéticos y ambientales, con una reacción autoinmune contra las células beta pancreáticas, que progresa con una caída de los niveles plasmáticos de insulina y resultando en hiperglicemia.
Presentación clínica
Cuadro clínico inicial clásico:
- Generalmente el paciente con DM1 es un niño o adolescente y presenta un cuadro clínico muy sugestivo, con poliuria, polidipsia, pérdida de peso y polifagia. La poliuria se da por la glucosuria, ya que la hiperglucosuria supera la capacidad de transporte a nivel tubular. Existe un efecto osmótico que aumenta la pérdida de agua. La polidipsia se debe a mecanismos de compensación activados por la poliuria instalada.
- Algún factor ambiental actúa como desencadenante de un proceso autoinmune, dirigiendo la inmunidad celular y humoral específicamente contra las células beta pancreáticas, lo que provoca su destrucción progresiva.
- Al principio, incluso con una caída en la secreción de insulina, no hay repercusión clínica. A medida que se presentan signos y síntomas típicos, se realiza el diagnóstico clínico, sin embargo la destrucción intensa de las células beta pancreáticas, ocurre después de algunos meses.
- Es bastante habitual que ocurra la fase de luna de miel o remisión en los primeros meses tras el diagnóstico (entre el 3º y 6º mes), en los que hay poca necesidad del uso de insulina exógena, ya que un 20-30% del total inicial de las células beta pancreáticas siguen siendo funcionales.
Cetoacidosis diabética (CAD):